El pasado mes nos hicimos eco de una noticia ciertamente esperanzadora. Al parecer recientes ensayos clínicos habían surtido efecto en pacientes con algún tipo de alteración conductual. Ahora la disensión, la inquietud intelectual y otros desequilibrios podrían ser tratados. El fármaco ha sido desarrollado conjuntamente por el instituto de sociabilidad asistida y la farmacéutica de estudios avanzados.